Reseña: El verano en que me enamoré, de Jenny Han

¡Hola a todos! ¿Qué tal estáis? Hoy os traigo la reseña de un libro que leí hace un par de días y que me ha decepcionado muchísimo. Y no por la historia que cuenta, sino por su odiosa protagonista. La reseña será muy cortita pues ni siquiera he apuntado citas durante la lectura del libro (ya podéis imaginar lo poco que me gustó, xD).  

Ficha Técnica:

Título: El verano en que me enamoré
Título original: The summer i turned pretty
Trilogía: Verano I
Autor: Jenny Han
Editorial: Destino
Encuadernación: Rústica con solapas
Nº Páginas: 268
Precio: 13,95€
ISBN: 978-84-08-00783-8

Orden de lectura de los libros:  

1º- El verano en que me enamoré

2º- No hay verano sin ti
3º- We'll Always Have Summer 

Resumen de la contraportada: 

Belly nunca ha sido la clase de chica a la que le pasan cosas. Año tras año, sus vacaciones transcurren en la casa de la playa pero los chicos apenas se dan cuenta de lo mucho que se fija en ellos. Cada verano, Belly desea que eso cambie. Y, esta vez, lo hará: éste será el verano en que Belly se volverá guapa, el verano en que se enamorará… aunque también será el verano en el que todo cambiará. Para bien, y para mal.

Opinión Personal (sin spoilers): 

Si tengo que ser sincera, todavía me estoy preguntando por qué caí con este libro, pues no es ningún secreto que ya estoy bastante cansada de este tipo de historias. A ver, no quiero decir que sea un mal libro, y podría haber disfrutado enormemente de él si no fuera por su exasperante protagonista, una de esas chicas que están convencidas de que el mundo gira a su alrededor. Creo que no necesito una exhaustiva descripción de este tipo de protagonistas tan odiosas.

La historia no puede ser más tópica. Belly es una chica que por fin ha cumplido 15 años y ha dejado de ser la niña a la que todos ignoran. Se ha convertido en una adolescente guapa en la que los chicos se fijan, ¡por fin! Su sueño hecho realidad. Desde niña, su madre siempre los lleva de vacaciones a ella y a su hermano Steven a la casita de la playa de su mejor amiga Susannah, donde se reúnen junto a los hijos de esta última, Conrad y Jeremiah. Para Belly los veranos son especiales. El resto del año es solo una imagen emborronada de su verdadera felicidad, el tiempo que debe pasar velozmente para poder llegar a donde realmente quiere estar: en la casita de la playa junto a Susannah, a la que adora con locura, Conrad y Jeremiah. Sobre todo Conrad, del que ha estado enamorada desde que tiene uso de razón.

Belly quiere a Conrad por encima de todo, aunque crea que ya lo ha superado, aunque sienta que se ha convertido en un completo desconocido. Inconscientemente se ha convertido en uno de esos amores platónicos que nunca se olvidan, a pesar de que él no le preste atención alguna y la trate como una hermana pequeña. Es un amor obsesivo y supuestamente unilateral, o al menos lo era hasta este verano en el que todo cambia. No olvidéis que Belly se ha despertado como una preciosa sirena a la que todo chico quiere conquistar, incluido Conrad, que jamás lo admitirá abiertamente. Belly se armará de valor e intentará pasar página, olvidarse de lo que siente por él, especialmente ahora que se ha vuelto más inaccesible y rebelde, que fuma, bebe y se mete en peleas. ¿Qué le está pasando a Conrad? ¿Qué es eso que le están ocultando todos a su alrededor? Por supuesto, hay que estar ciega para no verlo, pero obviamente, Belly prefiere pasar los días preocupándose de su propia felicidad y tonteando con un chico al que conoce ese verano. Así como también prefiere dedicar todos y cada uno de sus pensamientos a Conrad, odiarlo y quererlo a partes iguales.

En fin, me abstengo de contar más porque la historia es muy cortita y no quiero estropearos las pocas sorpresas que hay. El caso es que el verano de Belly transcurre en esa casita, y seremos testigos de sus quebraderos de cabeza y de los problemas que realmente se le vienen encima, a ella y al resto de su familia veraniega. Es una pena, porque de haber contado con una protagonista más carismática y con los pies en la tierra el libro podría haber estado muchísimo mejor. En cambio, nos vemos obligados a soportar las tonterías de una adolescente con demasiados pajaritos en la cabeza, que actúa según sus frívolos deseos que siempre se resumen a lo mismo: al amor que siente por Conrad. Pero chica, ¿no ves que a Conrad le pasa algo? Intenta pensar un poco en los demás y no solo en ti misma, ¡por favor! Que la vida no se resume a Conrad y a los chicos encantadores que se fijan en ti. En fin… de verdad, que no puedo con este tipo de protagonistas ¬¬.

Lo mejor del libro es que se lee solo, de esos libros que aunque relaten una historia donde apenas ocurre nada cuentan con un ritmo cegador que hace que devores las páginas con avidez sin apenas darte cuenta. La historia es muy sencilla y tiene sus momentos buenos, como por ejemplo las escenas entre Susannah y Laurel, esa amistad tan sólida y bonita que existe entre ambas. Lástima que en el fondo también sean personajes bastante planos, como todos los demás (incluyendo la protagonista). Jeremiah es un personaje que me ha gustado mucho, el alma de la fiesta (o del verano más bien), pero se le llega a dar tanto protagonismo a Belly a su irracional amor por Conrad que lamentablemente pasa un poco desapercibido. En cuanto a Conrad, también me habría gustado conocerlo mejor. Llegamos a descubrir por qué actúa como lo hace (aunque era bastante obvio, la única que no se da cuenta es Belly), pero nunca llegamos a conocer sus verdaderos sentimientos por Belly. ¿De verdad la quiere como algo más que una hermana? ¿Desde cuándo?

El final es bastante cerrado para aquellos que no quieran seguir con la trilogía, aunque dejando las puertas abiertas para las siguientes entregas. No obstante, estoy convencida de que el verano no volverá a ser lo mismo después de esto.

El verano en que me enamoré es un libro tremendamente adictivo que cuenta una historia muy sencilla y dulce. Tiene partes tan tristes como bonitas, pero que desgraciadamente son empañadas por una protagonista un tanto egoísta y superficial que le resta muchos puntos a la novela. 

4/10

Una novela sencilla, adictiva, dulce y amarga. Una pena que la voz de la protagonista no sea de ayuda para hacerla brillar.

¿Lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido a vosotros?

¡Un besote a todos!