Reseña: Doce Campanadas de Nisa Arce

¡Hola a tod@s! Si hace unos días os presentaba el primer libro de Nisa, hoy quiero haceros una reseña de su segunda publicación por La Página Joven. El sábado fue la presentación y me moría de ganas por leerme el libro. Lo empecé ese mismo día, pero como he estado estudiando, hasta anoche no había podido retomarlo y terminar de leerlo.

Ficha Técnica:
Título: Doce Campanadas

Autora: Nisa Arce

Editorial: La Página Joven

Nº de páginas: 183
ISBN: 978-84-937717-1-3
Precio: 10€

Sinopsis: 

La segunda novela de Nisa Arce se desarrolla en localizaciones urbanas de Madrid y Las Palmas de Gran Canaria. Personajes que antaño compartieron la vida universitaria en la capital de España se reencuentran una noche de Fin de Año y recuperan una amistad y una historia de amor que el tiempo había distanciado.

Un análisis de la joven sociedad actual acompaña a la trama de esta novela, que trata aspectos de la vida contemporánea desde la perspectiva de una relación homosexual entre dos estudiantes cuyos caminos se entrecruzan gracias a un anuncio en el tablón de la Facultad en la que estudian.

Opinión Personal:

La historia se desarrolla en Madrid, y comienza con Doramas, un joven periodista canario, que en un intento fallido de volver a casa para pasar el fin de año en familia, se queda en tierra tras la imprevista cancelación de su vuelo. El verse solo y sin ganas de salir a ninguna parte, mezclado con la nostalgia que despiertan las fechas tan señaladas, lleva a Doramas a caminar hacia aquellos recuerdos perdidos de la adolescencia, y las casualidades de la vida a encontrarse con alguien que pensaba que no volvería a ver jamás: su ex-novio Jaime. Y con este reencuentro, lleno de preguntas silenciadas por el transcurso del tiempo y que vuelven a tomar forma, Nisa nos conduce diez años atrás en el tiempo, a la Facultad de Ciencias de la Información de Madrid, para contarnos con multitud de detalles la vida de Doramas y Jaime en los años compartidos como compañeros, amigos, y pareja.

Si bien Doramas se presenta como una persona más simple y conformista, Jaime es sin duda el personaje más complejo de esta historia, siempre buscándole un sentido a todo lo que le rodea, incluso a las meras apreciaciones, sin conformarse con menos de lo que su visión de futuro o sus propios sueños le indican que puede llegar alcanzar si mantiene fija esa visión, sin rendirse. Los distintos ideales y forma de pensar de cada uno de ellos será un factor crucial en su relación, que tanto podrá unirlos como separarlos. Otros personajes importantes de la novela son Luis y Livia, grandes amigos de la pareja protagonista, que los acompañarán en las etapas más importantes de sus vidas, recalcándonos eso tan importante que no debemos perder de vista: la amistad.

No quiero desvelar más de la trama, porque el libro tiene poquitas páginas y es mejor disfrutarla al completo. Pero sí quiero hablar un poco sobre mi impresión general. Quería comenzar contando los detalles que me han fascinado más de la historia, pero ahora que me siento y lo analizo, creo que la historia destaca por si sola, pues tiene lo justo y necesario para calar hondo y dejarte una sensación maravillosa y ese regusto amargo de tristeza y nostalgia al terminar la lectura.

El gran peso de la historia lo lleva la relación de Doramas y Jaime, el presente, el pasado, y todos los entresijos de la misma, y la relación en sí está perfectamente llevada, manteniéndote en vilo de principio a fin. En general, tanto los personajes como las situaciones vividas por cada uno de ellos son increíblemente cercanos, lo que facilita notoriamente el poder identificarte con ellos. Si mal no recuerdo, Nisa describió la novela como el paso de la adolescencia hacia la madurez, y creo que es un resumen claro y conciso de la misma. La historia destila melancolía en todas sus páginas (desde que comencé a leer se me hizo un nudo en el estómago que se mantuvo hasta el final de la misma). Por mi parte la calificaría como una reflexión de la vida misma: la amistad; la familia; las esperanzas y sueños de futuro cuando eres un adolescente; lo bueno y lo malo de la vida universitaria; los errores y las consecuencias de estos; el primer amor; los desengaños; el encontronazo inesperado con la realidad, que sin dar tiempo a reaccionar te espera a la vuelta de la esquina; etc.

Doce Campanadas describe el paso del tiempo, y todo lo que ello conlleva. Y es indudablemente aquí donde los que hemos pasado cierta edad nos vemos irremediablemente identificados: ¿quién no ha perdido algo que en su día consideró muy valioso? Ya sean sueños, amistadas o meras oportunidades. La historia es capaz de sumergiste a tu propia vida y replanteártela: cuántos sueños hemos conseguido y cuántos por el contrario se han ido desdibujando tras perder esa chispa propia de la vitalidad de un adolescente, incapaz de prever lo que le depara el futuro; cuántos amigos se han extraviado por el camino y desgraciadamente no volveremos a ver; a ese primer amor que creíamos que sería para toda la vida y quedó en meras ilusiones pasadas; etc. Es imposible evitar pensar en el pasado, en el presente y en el futuro. En lo que tenemos y lo que nos queda por superar hasta llegar a esa estabilidad que aún muchos buscamos, y otros están comenzando a establecer.

Si a lo comentado le añado el hecho de que Doramas es de Gran Canaria, es imposible que no me identifique con él, independiente mente del sexo de éste. La historia es preciosa y melancólica, con un deje de tristeza perceptible desde la primera página, que no deja indiferente, os lo puedo asegurar.

Finalmente, destacar por último, que tanto la ambientación (la mayor parte en Madrid, aunque también nos conducen en su momento a ciertos rincones de la isla de Gran Canaria), como la narración son considerablemente buenas. Es más, creo que Nisa se ha superado, pues el libro está incluso mejor escrito que Pierrot.


Conclusión: Doce Campanadas es un libro que recomiendo muchísimo a todos aquellos que busquen una historia profunda, donde te detallen aspectos de la vida cotidiana contados de manera clara y sobre todo reflexiva. Es un libro que te hará pensar, sentarte y escarbar en tu adolescencia, y sentir nostalgia por todos aquellos momentos vividos que ya nunca volverán. Cuando llegué al final, se agolparon miles de sensaciones en mi cabeza: imágenes sobre mi adolescencia, los años loquísimos en la universidad (entre exámenes y horrorosas resacas), mis amistades (las que conservo y las que se han perdido con el paso del tiempo), esos ligues poco duraderos entre fiesta y fiesta, el comienzo del fin de la locura universitaria, mi primera relación duradera, mi vista hacia el futuro laboral, etc. Y con todo esto no pude evitar derramar unas lágrimas de melancolía, no porque la historia sea trágica, sino por mí misma, por la añoranza y nostalgia hacia aquellos maravillosos años que viví, y no porque esté descontenta con mi vida actual, sino simplemente porque me doy cuenta de que no sólo los años pasan, sino también miles de experiencias que guardaremos en algún rincón lejano de nuestra memoria, y que gracias a Nisa, hoy he vuelto a desenterrar.

Nota final: 10/10